Hace tiempo que tenía ganas de ir a verlos, y finalmente hace una semana, lo logré. El espectáculo duró una hora reloj, y valió cada centavo. Realmente no mintieron cuando dijeron que el público es parte del espectáculo. Las coreografiás, la escenografía y en especial la música, nada fue dejado al libre al albedrío. Está para sacarse el sombrero ante estos muchachos: no sé si lo que hacen se puede llamar teatro, desde ya que no es una obra convencional, la trama puede significar muchas cosas distintas para cada persona de la audiencia, pero no importa. Es excelente lo mires por donde lo mires. Así que si bien dicen que el espectáculo cambia con cada función, porque es el mismo público el que lo hace diferente, hay algo que se mantiene constante: los 60 minutos que dura, van a ser el apogeo del día para cualquier espectador.
3 comments:
Es una experiencia increible! La participacion del publico suma demasiado. Cuando fui me rompieron una de esas tablas de telgopor encima.
Mira vos!A un flaco que estaba al lado mío le estallaron uno en la cabeza?Habrá sido a vos?Jaja. Me alegro mucho de haber tenido la oportunidad de ir a verlos. Es una lástima que estas sean las últimas funciones de la compañía (creo que ahora se van a Bogotá), aunque hay que reconocer que estuvieron muchos meses en Buenos Aires (y aún continúan logrando funciones agotadas con semanas de antelación).
Saludos!Y gracias por pegarte una vuelta!!
A mí me mojaron! Es genial, genera como un torbellino de emociones e impresiones sensoriales. Uno sale como encantado.
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